miércoles, 20 de enero de 2010

HAITI

El fanatismo religioso, tan idéntico al fanatismo político, futbolistico…
Es evidente la incapacidad de reflexión desde el fanatismo.
El fanático, no sabe que es REFLEXIONAR, RAZONAR.
El pueblo de Dios, esta claro que no es el mestizo, el indoamericano, el quechua, el araucano, el mohicano o el árabe o chino o cualquier otro.
El pueblo de Dios, es el pueblo judío.
De que hablan entonces?
Aquellos que no se compadecen por fanatismo de la tragedia haitiana, tienen todo el derecho de equivocarse, odiar, denostar y hacer lo que se les venga en gana.
En todo caso, me gustaría conocer el “DEMONIOMETRO”, “DIABLOMETRO”, “LUCIFEROMETRO” Y DE DONDE LO SACARON, PARA HABLAR Y MANIFESTAR TANTAS SUBJETIVIDADES RAYANAS CON EL ORATISMO COLECTIVO DE FIELES SECTARIOS, ENERGÚMENOS DE LO QUE LES METIERON EN LA CABEZA, por la vil ignorancia que tienen desde pequeños.
Aunque parezca absurdo, los tesistas de la tragedia humana, si existen, están con nosotros y hasta escriben en blogs!!!

.- Que importan muertos, mutilados, heridos, huérfanos, hambrientos, desolados, locos de dolor, desgraciados y todas las adjetivaciones que pueden calificar el horrendo dolor de perder vidas, como se perdieron y pierden en Haití?? No les importa.

La “civilización”,es un termino tan cambiante, como el ser humano.
Épocas, lugares, circunstancias, influyen en la óptica religiosa.

Mas la indolencia, la condena, la palabra fácil para denostar, es patrimonio permanente de los batracios invertebrados. (los hay??)
A mi, esto ultimo, no me llega.
Y a usted?